Una hora más de clases: optimismo en los padres, preocupación en los docentes

Si bien se trata de una propuesta que recién será evaluada mañana en el Consejo Federal de Educación, padres y docentes ya sentaron postura sobre la iniciativa.

El pasado martes, el Ministro de Educación de la Nación Jaime Perczyk propuso extender la jornada de clases en la primaria una hora más, con la firme intencionalidad de “intensificar los aprendizajes y recuperar saberes”. Ante esta posibilidad, que será evaluada mañana en el Consejo Federal de Educación (CFE), docentes primarios, directivos y padres misioneros sentaron postura sobre la propuesta que mantendría a los niños una hora más en clases.

Al ser consultada, la representante de la fundación Padres Organizados Misiones, Amalia Faut, indicó “lo charlamos en el grupo de padres, en principio está bueno que se ponga en agenda las cuestiones educativas”. Asimismo, si bien es una propuesta todavía, “lo celebramos y estamos de acuerdo, los chicos estuvieron mucho tiempo fuera del aula y este año estamos viendo las consecuencias. Se necesita organización nada más”

Mientras la postura de los padres consultados se mantuvo en sintonía, concordando la mayoría que se trata de una buena alternativa; no fue así desde la perspectiva docente, donde mostraron disconformidad y preocupación ya que este cambio de horario implicaría, entre otras cosas, una nueva discusión salarial, una reorganización escolar y fortalecer la partida alimentaria para los niños, que muchas veces dependen del desayuno o la merienda que les brinda la escuela.

La visión de los padres

Uno de los puntos que plantearon las madres consultadas fue que este nuevo horario beneficiaría no solo a los niños sino a los padres. Este es el caso de Sol Irrazábal, mamá de dos niños de primaria, que afirmó: “Los padres trabajamos muchas horas y a muchos se les complica contar con ayuda extra o mandar a sus hijos a alguna actividad extracurricular, me parece bien así tengan un idioma o alguna actividad recreativa, todo lo que se pueda ofrecer desde la escuela suma en esa edad, donde están activos para incorporar conocimientos.”

Esa opinión se situó en concordancia con Gabriela Ortiz, otra madre que tiene su niña en sexto grado, “me parece bien, el horario al que salen los niños nunca coincide con los padres si éstos trabajan en la administración pública o en horario de comercio. Si salen una hora más tarde nos da la posibilidad de salir y volver a casa todos juntos”.

No obstante, aparte del beneficio que implicaría para los padres, “me parece positivo porque veo muy deficiente el tema de la educación, se está trabajando muy poco y a los chicos les está costando agarrar el ritmo después de la pandemia”.

En esa misma línea, Claudia Dávalos, mamá de una niña que cursa cuarto grado, confesó: “Me parece perfecto, siempre y cuando se aproveche esa hora con aprendizajes y no sea una hora libre, después de todo lo que se perdió en los dos años anteriores”.

Finalmente, Micaela Procacci que tiene su hijo en el tercer grado afirmó: “No me parece mala la idea, en mi caso mi niño tiene un trastorno de déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y le cuesta centrar la atención, en él se complica, pero aún así no me parece mala idea”.

La voz docente

En cuanto a los docentes y directivos, las preocupaciones más manifestadas fueron la alimentación de los niños, los cambios organizativos que implica agregar una hora más a clases, y la cuestión salarial.

Al ser consultada, la directora de la Escuela 821 de Posadas, Elsa Charczuk afirmó “implicaría reorganización familiar e institucional, debemos prever cuestiones como por ejemplo desayunos y meriendas reforzadas, los docentes deberían ver cómo se organizan ya que muchas veces trabajan en dos o más instituciones, también las familias deberían tener el compromiso de acompañar esta medida”. A pesar de las dificultades, “si es para mejorar la calidad educativa, está bien”, admitió.

A esta apreciación se le sumó el director de la Escuela 905 de El Soberbio, Diego Carballo, quien indicó: “En el servicio de comedor hacemos maravilla, tenemos que pedir donaciones para poder llegar a darle la comida a los chicos porque lo que nos mandan desde Comedores Escolares alcanza para una semana, se va a complicar si se tienen que quedar una hora más, necesitan desayunar y merendar bien, por ahora es inviable”.

Por otro lado, también manifestó su preocupación en relación a lo salarial: “Con los docentes de nuestra escuela coincidimos que es poco viable en la provincia. Si ni siquiera nos quieren pagar un aumento, mucho menos una hora más de trabajo”, explicó Carballo, “Misiones primero tiene que administrar mejor los recursos, si no será imposible”, argumentó.

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