Tres Fronteras: casi la mitad de los visitantes brasileños y paraguayos no cruzan a la Argentina por la demora en controles

Así lo establece un sondeo realizado por la Cámara de Comercio de Puerto Iguazú; piden acelerar los chequeos en el Puente Internacional Tancredo Neves

Puerto Iguazú está perdiendo por día millones de pesos porque visitantes de Paraguay y Brasil desisten de intentar cruzar al lado argentino de la Triple Frontera por las demoras en los controles migratorios y aduaneros en la cabecera argentina del puente internacional Tancredo Neves.

Esa es la conclusión de un sondeo que presentó hoy la Cámara de Comercio de esta ciudad, en el que se indicó que el 46% de los visitantes brasileños y paraguayos residentes en la zona durante julio pasado afirmaron que “desisten de cruzar por la demora en el puente”. De los que sí atravesaron el paso, el 31% manifestó que gastaba entre 200 y 500 dólares; el 11%, más de 500 dólares y el 58% restante, entre 50 y 200 dólares.

En julio pasado, el Puente Internacional Tancredo Neves se convirtió en la principal entrada a la Argentina al duplicar en volumen de tránsito de personas al Aeropuerto Ministro Pistarini de Ezeiza, que tradicionalmente es la primera puerta de ingreso y egreso del país. “En las vacaciones de invierno el Tancredo Neves tuvo 35.000 personas por día entrando o saliendo contra 17.000 del aeropuerto de Ezeiza”, señaló a LA NACION, Florencia Carignano, titular de la Dirección Nacional de Migraciones.

El motivo principal es el ventajoso tipo de cambio que hace que ciudadanos paraguayos y brasileños busquen cruzar a cargar combustible, comprar vino, ir a un restaurante, pasear o quedarse en hoteles en el lado argentino. “Hay personas que, por el tipo de cambio, están cruzando hasta 14 veces por día a la Argentina”, dijo Carignano en diálogo con este medio.

Pedido

Comerciantes, hoteleros, gastronómicos, taxistas, remiseros, operadores turísticos y los vecinos en general de Puerto Iguazú están pidiendo a las autoridades nacionales para que encuentren la forma de agilizar los controles de Migraciones en el puente Tancredo Neves, donde las filas, a veces, pueden demorar más de dos horas y desalientan a los extranjeros. El sector propone habilitar un corredor turístico, donde el que ingresa por unas pocas horas no tenga que esperar tanto.

Cabe destacar que esto sucede en una Triple Frontera donde los otros dos países tienen controles absolutamente laxos que buscan, principalmente, no penalizar el intercambio comercial, turístico y la actividad económica en general.

Cualquier argentino o ciudadano de otro país puede cruzar a Foz de Iguazú, en Brasil, y luego a Ciudad del Este, en Paraguay, en un minuto, que es lo que se demora en pasar la mitad brasileña del Tancredo Neves o el Puente de la Amistad, que vincula a Ciudad del Este con Foz.

Esos dos países históricamente implementaron un sistema por el que el ingreso migratorio lo hace voluntariamente la persona que permanecerá en el país por más de una noche. Algo que se complementa con controles más exhaustivos que se trasladaron fuera del perímetro de las dos ciudades, para aquellos que se van a adentrar más para recorrer el resto de sus respectivos países.

De esta forma se agiliza lo que se denomina el Tránsito Vecinal Fronterizo, que es cuando un residente o turista cruza al otro lado de la frontera por unas pocas horas y vuelve al país de origen.

Tan intenso es el tránsito entre Ciudad del Este y Foz de Iguazú que estas dos ciudades están completando un segundo puente internacional, denominado De la Integración, de 760 metros de largo que estará habilitado en diciembre próximo.

Este paso, que se utilizará para los camiones de carga principalmente, vinculará a Puerto Franco y Ciudad del Este con Foz de Iguazú exactamente en el punto donde la Argentina, Paraguay y Brasil se unen en la confluencia de los ríos Paraná e Iguazú, justo frente al Hito Argentino de la Triple Frontera. Ahí donde brilla por su ausencia el viaducto que falta en este punto de la región: una unión física entre Paraguay y la Argentina.

Sin gastar

El estudio que se presentó hoy fue realizado por una compañía local, llamada Consultora Internacional, y se hizo durante todos los días de julio, en Ciudad del Este y Foz de Iguazú y en la fila del puente Tancredo Neves, con un promedio de 300 respuestas diarias en forma online y 160 en encuestas directas.

“El resultado demuestra lo que venimos sosteniendo, tenemos una enorme pérdida de trabajo y oportunidades porque casi la mitad de los visitantes dice gastar entre 200 y 500 dólares y la otra mitad un promedio de 100 dólares, todo porque no podemos encontrar una forma de agilizar este paso fronterizo”, señaló a LA NACION, Joaquín Barreto, titular de la Cámara de Comercio de Puerto Iguazú.

La organización envió el estudio al gobernador Oscar Herrera Ahuad y a legisladores misioneros en el Congreso nacional. El senador y exgobernador Maurice Closs ya se manifestó en favor de revisar las leyes fronterizas para permitir soluciones.

Demoras y agilidad en el Tancredo Neves

Por el momento, la directora de Migraciones explicó a este medio que el Tancredo Neves tiene 57 casillas para efectuar el control del DNI de cada ingresante o egresante, más que ningún otro paso fronterizo.

También afirmó que para el próximo fin de semana largo se incorporará más personal y se buscará instalar “5 o 6 casillas más” siempre y cuando puedan entrar en la cabecera de un puente donde ya no entra casi nada más. “No hay ni siquiera lugar para estacionar allí”, señaló Carignano.

Los comentarios de la funcionaria, que afirmó que “mucho más no se puede hacer” con las largas filas que soportan los residentes y turistas tanto en Iguazú como en Posadas, en el puente Roque González de Santa Cruz (donde pueden superar las cuatro horas) generaron reacciones en las redes sociales.