Los usados no subirán igual que el dólar blue porque ya venían aumentando antes

Los vehículos tienen incrementos todos los meses por la inflación pero además suben su valor por la escasez de cero kilómetros. Tendrán modificaciones por los cambios en el dólar pero no serán en el mismo porcentaje, aclaró Fabián Malarczuk.

Los movimientos del dólar están causando alteraciones fuertes en todos los rubros de la economía nacional y el sector automotriz está fuertemente vinculado a la divisa norteamericana. Sin embargo, se estima que los usados no acompañarán el salto que pegó el dólar blue esta semana porque ya venían registrado subas prácticamente dos veces al mes.

Al respecto, Fabián Malarczuk, de la Cámara de Comercio Automotor de Misiones, indicó que “en los casos donde se cerró de palabra la operación comercial, se tiene que respetar el precio, por ética” a pesar del salto que pegó el dólar esta semana.

Sin embargo, “en los casos que se dan después de la suba, se tiene en cuenta el nuevo valor del dólar”, dijo en declaraciones.

Aunque aclaró que “los autos ya venían subiendo, los usados no van a aumentar en la misma proporción de la disparada del dólar de esta semana. En ese aspecto está estabilizado”.

Al respecto de los precios contó que “antes de este incremento del dólar teníamos autos de menos de un millón de pesos. Ahora con la suba del dólar han pasado la barrera”.

“Pero todavía tenemos autos del millón, o millón cien mil pesos. El tema con esos autos que son 2006 o 2007, es que se debe verificar el estado porque los repuestos, el mantenimiento, es otro costo”, sostuvo.

 

 

Disponibilidad y demanda

En las últimas semanas la venta “se estuvo moviendo relativamente bien en los usados semi nuevos, con personas que no están pudiendo conseguir 0km, se pasan al usado semi nuevo, modelo 2020 o 2021”.

“Esa gama se está solicitando. Veremos ahora como queda posicionado el mercado a partir de este aumento del dólar”, explicó.

Malarczuk señaló que la modalidad es “hacer negocios enganchados. La persona ya tiene ubicado el vehículo a comprar y en esas condiciones vende el suyo y compra. El tema es no quedarse con el efectivo, es el denominador común”.

“A nosotros nos pasa como vendedores, vendemos un auto y ya vemos opciones de compra a ver como reponemos. El grave error sería quedarse con los pesos”, advirtió.

Sobre la demanda dijo que en la ciudad “siempre se piden vehículos de motor chico porque no necesitan requerimiento alto”.

“Pero hay otros como utilitarios como camionetas, estos vehículos de alto consumo y mucha potencia tienen su salida pero son clientes selectivos. Pero lo que más sale son los vehículos más chicos”, culminó.

 

 

Ventas frenadas

 

A nivel nacional algunas concesionarias paralizaron las operaciones en el negocio de la venta de automóviles, que ya atravesaba un panorama complicado por la falta de oferta de vehículos.

“El que vende, cuida su stock. El sector sigue con un gran problema de oferta, sobre todo de los modelos que son extra Mercosur. Los autos de producción nacional son los que tienen más demanda. Mientras que el comprador está esperando a ver a dónde se estabiliza el valor del dólar”, destacó Alejandro Lamas, secretario de la Cámara del Comercio Automotor (CCA).

En el sector confirmaron que los precios en pesos registraron subas a principios de julio, luego de la salida del Ministerio de Economía de Martín Guzmán que rondaron entre 10% y 15% para los vehículos 0 kilómetro. Ese porcentaje también se trasladó a los automóviles usados.

“En el caso de los usados hay una gran disparidad de precios. Todo depende si el que vende tiene o no necesidad de concretar la venta. El mercado está distorsionado y con mucha cautela a ver qué pasa”, agregó Lamas.

“Puede ser que contactes a un vendedor y hoy te diga que no vende. No es avivada o especulación es un modo de protegerse en un momento de incertidumbre. La gente quiere hoy sacarse los pesos de encima, prefieren tener el auto o los dólares y queda el mercado paralizado”, indicó.

Fuentes de las concesionarias remarcan que la brecha cambiaria, en este caso, a diferencia de años anteriores no genera una “oportunidad” para la compra de vehículos.

“En 2013, por ejemplo, había una brecha muy amplia pero la diferencia es que no había problemas de stock. La concesionaria vendía porque luego había reposición. El problema más grave de hoy es la reposición y todo el mundo se cubre”, señalaron.

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