Especial 119º aniversario de Puerto Iguazú: Testimonio de Don Emilio Aranda pionero de nuestra ciudad

Desde el año 2011 Cataratas del Iguazú fue declarada una de las siete Maravillas Naturales del Mundo. En realidad, ¡¡¡siempre lo fue!!! 

En ese año millones de personas en todo el planeta la eligieron y votaron para que así sea. ¿Pero cómo se llegó a ese logro? 

¿Por la promoción que llevó a cabo la Fundación New Seven Wonders? Si.

¿Por la difusión en las redes sociales que impulsamos todos nosotros como Iguazuenses? Por supuesto. 

Se cree que también tuvo mucho que ver que turistas de nuestro país y el mundo hayan podido llegar cuando todavía no existía la ruta pavimentada hasta la Maravilla Natural para conocerla, admirarla y conmoverse con su belleza.

De esa manera cuando varios visitantes volvieron a sus lugares de origen describieron a sus amigos, familiares, hijos y nietos lo que sintieron estando en el corazón de la selva misionera, ese primer relato fue lo que entusiasmó a todas esas personas ya multiplicadas en cantidad, más adelante visitarlas y llegado el momento votar por ellas. ¡Ya que no se puede elegir algo que no se conoce y no se admira!

Emilio Aranda, con una niñez muy dura que no conocía de flojedad que entre tantos otros trabajos, supo junto a su familia cosechar yerba silvestre en la selva, tarea que solo era reservada para los más fuertes. ¡Pero esa es otra historia!

Don Emilio fue un operario que por 48 años prestó servicios a la Administración de Parques Nacionales, integrando las cuadrillas de camineros, que mantenían a pico, pala y machete el camino desde Iguazú a Cataratas.