Cuatro ciudadanos argentinos, uno de ellos menor de edad, que trabajaban en condiciones infrahumanas fueron rescatados este din de semana en la localidad de Nova Petrópolis, una zona rural del estado de Rio Grande do Sul, en la frontera con Misiones.
Los trabajadores rurales, como muchos otros, migraron a Brasil con el motivo de hacer una diferencia económica, como lo había publicado en su momento PRIMERA EDICIÓN, tras las polémicas declaraciones de un concejal brasileño. Sin embargo, este grupo se encontró con un infierno.
Según O Globo, en la denuncia, el grupo manifestó que arribaron al lugar como leñadores para realizar labores en un eucaliptal. Dos de ellos, llegaron al vecino país en agosto de 2022; mientras que un padre y su hijo menor, tiempo después.
Todos recibieron la promesa de que terminado el trabajo recibirían su paga y se podrían ir. No obstante todo fue una pantalla para explotarlos.
Desde el principio debieron armar un chozas improvisadas en el monte, no contaban con agua potable, energía eléctrica ni baños. Y, a través de amenazas de muerte, fueron obligados a trabajar en condiciones de esclavitud, se supo.
El 31 de marzo, trascendió, le pidieron a su empleador que les pague. Este en cambio los trasladó y los abandonó, sin comida ni dinero.
El viernes, aprovecharon que un presunto empleador invitó a cenar a dos de los trabajadores en el municipio de Bom Principio, a las afueras de Nova Petrópolis. Luego de la comida, el hombre los abandonó a su suerte frente a un hotel y se fugó.
El dúo acudió a la sede de la Policía Militar y denunciaron a su explotador. Manifestaron que vivían en Nova Petrópolis y que trabajaban como leñadores, pero nunca recibieron un salario y eran explotados laboralmente.
El sábado por la tarde, la Brigada Militar se puso manos a la obra y, junto a la Policía Federal y la Fiscalía de Trabajo, encontraron en el “campamento” al otro trabajador junto a su hijo de 14 años y corroboraron la precariedad del lugar donde vivían y trabajaban.
En simultáneo, otro grupo policial se dirigió a Pinhal Alto, en busca del sospechoso que los engañó, pero no había nadie en casa, detalló la prensa brasileña. Alrededor de las 19, un vehículo con matrícula de Nova Petrópolis fue visto aproximándose al lugar, pero al ver a la Policía intentó huir. No pudo. Los agentes se acercaron al coche y descubrieron que en su interior había tres hombres.
Uno de los sospechosos, de 30 años y que sería el mismo que intentó abandonar a los dos trabajadores en Bom Princípio, tiene antecedentes por lesiones, amenazas, violación, desobediencia y delitos contra la flora. Había sido contratado por el propietario del terreno.
Por último, detallaron que el responsable de haber sometido al trabajo esclavo a los argentinos fue detenido y trasladado a la estación de la Policía Federal en Caxias do Sul.
Sobre los cuatros trabajadores argentinos esclavizados, no trascendieron sus identidades, pero se informó que no tenían documentos e ingresaron a Brasil ilegalmente, presumiblemente a través de una provincia del NEA.
Fuente: O Globo/ UOL/ Infobae/primera edición