“Pedile perdón a tu padrastro, cómo vas a decir que abusó de vos, si sos una guainita”

Las tres jovencitas llegaron llorando a la casa de su hermano mayor en busca de ayuda y le relataron que la menor de ellas, de sólo 11 años, habría sido víctima de abuso sexual por parte de su padrastro. Pero no sólo eso, sino que la niña le contó a su mamá lo sucedido y la mujer la obligó a pedir perdón por acusar a su concubino.
“Pedile perdón a tu padrastro, cómo vas a decir que abusó de vos, si sos una guainita”, contó la pequeña que le dijo su mamá el día que le mencionó lo que su padrastro le hizo.

De todas formas, la niña encontró el respaldo de sus hermanas de 18 y 17 años, con quienes el pasado 22 de octubre se dirigió hasta la casa del hermano mayor, quien las contuvo y radicó la denuncia ante la Comisaría de la Mujer de Oberá.
El acusado fue identificado como A.D.S. (33), el cual fue detenido por disposición del Juzgado de Instrucción Dos de Oberá. Preventivamente, está acusado de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.
En un primer momento la madre de menor también fue demorada, aunque luego se ordenó su libertad. De todas formas, se dispuso que le tomen declaración como sospechosa de encubrimiento, por lo que su situación podría cambiar.
Precisamente, la madre quedó bajo la lupa por los dichos de su propia hija, según consta en la denuncia.

El hecho
En sede policial, el denunciante mencionó que su hermanita le contó que el hecho se habría registrado en enero, circunstancia en que ella y su hermana de 18 se encontraban con el padrastro cuidando la casa del progenitor de éste.
Dijo que ya era de noche, su hermana dormía y ella estaba mirando televisión en la sala, momento en que el acusado la alzó en brazos y la llevó hasta otra habitación, donde la sometió.
La chiquita hizo una descripción precisa de los hechos y sus dichos corroborarían el abuso sexual con acceso carnal.

Pero con el abuso no terminó su calvario, ya que luego le comentó lo sucedido a su madre, la cual no reaccionó como esperaba la pequeña.
La mujer la agarró de un brazo y la llevó hasta donde estaba su padrastro y la obligó a pedirle perdón. La madre no le creyó ni le brindó ayuda.
Por otra parte, el día que radicó la denuncia el hermano mayor tomó el recaudo de resguardar a sus hermanas en su casa. Fue así que el acusado y su concubina se hicieron presentes en el lugar y trataron de ingresar al domicilio por la fuerza para llevarse a las menores, ante lo cual actuó personal policial y demoró a ambos.
El juzgado dispuso la detención del padrastro y la libertad de la madre, aunque su situación está supeditada a lo que oportunamente surja del relato de la niña en Cámara Gesell, lo cual podría complicar a la mujer si surgen indicios de que encubrió a su pareja.