Milei selló un acuerdo con la CIA y el Mossad para hacer inteligencia sobre terrorismo, narco y la Tres Fronteras
El presidente Javier Milei delegó el manejo de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en su jefe de Gabinete, Nicolás Posse, que a su vez hizo un acuerdo con los servicios de inteligencia de Israel y los Estados Unidos para investigar las amenazas de terrorismo, narcotráfico y la Triple Frontera por al nuevo alineamiento estratégico y geopolítico del Gobierno, más aliado a esos dos países.
Según pudo saber iProfesional de fuentes oficiales, el interventor en la AFI, Silvestre Sívori, se reunió varias veces junto a Posse con las máximas autoridades de la Central de Inteligencia Americana (CIA) y con el Mossad. Tambien colabora la Bundesnachrichtendienst, más conocida como la BND, o inteligencia alemana.
En tanto, la inteligencia local, supervisada por Posse y Sívori, quedó completamente militarizada por la intervención en la AFI del ex brigadier Jorge Jesús Antelo, secretario de Estrategia Nacional de la Jefatura de Gabinete. Pero en la AFI, Posse nombró a Silvestre Sívori, y dejó que Antelo designara una estructura llena de coroneles vinculados al ex jefe del Ejército y ex jefe de Inteligencia Militar, Cesar Milani, máximo operador de la ex presidenta Cristina Kirchner en las Fuerzas Armadas.
De todos modos, la influencia de Antelo no es tal, ya que Sivori eligió él mismo a su equipo. Hay ex militares elegidos por su experiencia en inteligencia pero también hay civiles. Ni hablar que la cabeza del organismo es un civil. No hay ningun coronel de la epoca de Milani», dijo una fuente de la AFI. Sin embargo, si bien no con ese grado, formaron parte de los equipos de Inteligencia en la epoca de Milani.
Los nuevos integrantes de la AFI
«Antelo es un profesional muy operativo y sabe mucho de seguridad, defensa e inteligencia», señalan allegados a Posse que admiten que el brigadier retirado influye sobre los ministerios de Defensa, de Luis Petri, y de Seguridad, de Patricia Bullrich, con quien más choca. Antelo nombró las cúpulas de las Fuerzas Armadas y de Seguridad.
En medios locales de inteligencia dejaron traslucir el malestar por la militarización de la AFI, que quedó completamente integrada por altos mandos militares. Hay dos motivos para ese cuestionamiento: la inteligencia local no puede ser compuesta con cuadros militares porque son dos áreas muy diferentes y a veces contrapuestas.
Silvestre Sivori, interventor en la AFI, fue designador por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse.
El segundo motivo es que muchos de esos militares tienen fuertes vínculos con el ex jefe del Ejército y de la inteligencia militar del kirchnerismo, el general retirado César Milani. El nexo que los uniría es Jorge Jesús Antelo. Milani fue cuestionado por ser el militar más allegado a la ex presidenta Cristina Kirchner y a la ex ministra de Defensa, Nilda Garré.
Además, el ex jefe de la ex SIDE, Miguel Angel Toma, junto a versiones judiciales, vinculan a Milani con el magnicidio del ex fiscal de la UFI AMIA, Alberto Nisman.
Los últimos pasos por la AFI en la época de Fernández
El abogado administrativista Silvestre Sívori trabajó junto con el ex ministro de Transportes Guillermo Dietrich durante el gobierno de Mauricio Macri (2015-2019). Pero no tiene experiencia alguna en materia de inteligencia local e internacional. Es un profesional capaz en su rubro y –factor clave- es sobrino de Nicolás Posse.
También se puede decir que «tomó una papa caliente»: la AFI durante la gestión del gobierno de Alberto Fernández fue desmantelada en sus cuadros técnicos más experimentados durante las gestiones de Cristina Caamaño, Agustín Rossi y Anal Clara Alberdi. Sívori debía ocupar un cargo: luego de explorar Milei distintas alternativas le adjudicó el control de la AFI.
«Pero el control no es todo de él. Hay una inteligencia desmantelada y una cabeza sin experiencia. Por eso, en materia de inteligencia externa quedó ‘intervenida’ por la CIA, el Mossad y el alemán BND y en materia interna por Jorge Antelo y un grupo de militares y muchos ligados a Milani y al ex funcionario de la AFI Fernando Pocino», señalaron a iProfesional ex altos funcionarios de la AFI y la ex SIDE.
Jorge Antelo, secretario de Estrategia Nacional de la Jefatura de Gabinete.
En la AFI se excusaron ante iProfesional de que la ley de inteligencia, la 25.520, impide informar sobre las identidades de los funcionarios de la estructura del organismo de inteligencia local, excepto el de su secretario o interventor, en este caso Silvestre Sívori. También los medios periodísticos están alcanzados por esa prohibición de difundir nombres.
Pero según las fuentes admiten las amenazas de terrorismo y de narcotráfico están siendo investigadas con la colaboración decisiva de la CIA, el Mossad y el alemán BND.
«Hay colaboración con CIA y Mossad en materia de lucha contra el terrorismo y narcotráfico y Triple Frontera. Sívori tuvo reuniones con ambos servicios. Lo del alemán no lo puedo confirmar», dijo una fuente de la AFI.
«Con la CIA estuvo en Washington en enero, y la semana pasada que vino Burns a Argentina», agregó el funcionario.
¿Quien se ocupó del narco y terrorismo hasta 2014?
Hasta 2014, esos objetivos, narco y terrorismo, eran ‘caminados’ por el ex director de Operaciones, Antonio «Jaime» Stiusso y unos 100 agentes. Incluso había dos mujeres que sabían hablar a la perfección todos los idiomas del mundo árabe y musulmán para detectar textos o conversaciones intervenidas a «causantes» islámicos.
Todo ese equipo se conformó despues de los atentados a la embajada de Israel (1992) y a la AMIA (1994). Pero la guerra entre los espías no K Stiuso, aliado de Nisman, y los K Pocino, aliado de Milani, desembocó en que Cristina Kirchner echó en diciembre 2014 a Stiuso y sus equipos.
Un mes despues, Nisman temió que sería removido de la fiscalía y denunció a Cristina Kirchner por encubrimiento del atentado a la AMIA y el 18 de enero de 2015 fue asesinado Nisman en su departamento de Puerto Madero.
El presidente Javier Milei organizó la AFI con ex militares.
«Ahora el gobierno de Milei le entregó la llave de la inteligencia exterior a los servicios extranjeros para fortalecer su alianza con Israel y los Estados Unidos y para prevenir atentados del Hezbollah, Hamas o cualquier organización del terrorismo islámico fundamentalista», señalaron a iProfesional altas fuentes de la inteligencia.
Luego de que Milei anunció en Israel el traslado de la embajada de Tel Aviv a Jerusalén, las cúpulas de las Fuerzas Armadas, la AFI y las fuerzas de seguridad encendieron las alarmas porque eso podía ser interpretado como una provocación a Hamas y a Palestina. Por lo tanto, podría tener consecuencias y la Argentina no está preparada para eso.
Es por eso que Posse viajó a Washington donde se reunió con el jefe de la CIA, William Burns, que luego vino a la Argentina hace dos semanas. Acordaron toda la cooperación. Lo mismo ocurrió con el agregado del Mossad y del BND en Argentina.
Sin embargo, Milei frenó este miércoles el traslado de la embajada a Jerusalén para facilitar la aprobación en el Senado del pliego del embajador designado Shimon Axel Wahnish. De lo contrario no tendría el voto de los senadores del PJ y del radical Martín Lousteau. Gracias a la oposición de estos, desapareció una hipótesis de conflicto.
«Un tema menos en el conflicto con Hamas y con el mundo musulman«, dijo una fuente de la AFI. «Sin duda esto descomprime», señalaron a iProfesional cerca del jefe del Estado Mayor Conjunto, Xavier Isaac, también nombrado por el dedo poderoso del ex aviador Jorge Antelo.
La organización interna de la AFI
Antelo se dejó ver por las distintas sedes de la AFI de la mano de amigos del mundo de la inteligencia. En círculos ligados a los espías aseguran que Antelo fue clave en la organización interna del organismo que en diciembre dejó la ex interventora Ana Clara Alberdi, cercana a Agustín Rossi, el antecesor que la dejó en el cargo.
De ese modo, por debajo de Sívori, interventor, está el secretario de Inteligencia (no se citan nombres propios por impedimento del secreto que protege legalmente a los funcionarios de inteligencia). El número dos, el Señor 8, es el verdadero jefe operativo de los espías; es un coronel retirado al que se asocia con la inteligencia paralela de Milani en los años de Cristina Kirchner.
Todos fueron bendecidos por Jorge Antelo, al que también se vincula a Milani. La ex presidenta, por entonces, le quitó peso a la ex SIDE para debilitar a Stiuso, con quien tenía profundas peleas, y le dio poder, presupuesto y tecnología a Milani, que terminó siendo el hombre fuerte del kirchnerismo.
En la subsecretaría de Reunión Interior opera un ex funcionario de la Policía de Seguridad Aeroportuario (PSA) allegado a Antelo por la vieja actividad en Aeropuertos. Fue designado por el número dos de la AFI.
Este funcionario fue director de Crimen Organizado de Cristina Caamaño, la primera ex interventora en la AFI con Alberto Fernández. Tiene vínculos con la ex ministra de Defensa, Nilda Garré, cuya hija dejó la AFI en diciembre.
El subsecretario de Reunión Interior es el cargo donde se consolidó el espía ex radical ultra K Fernando Pocino, introducido en los 80 por Enrique «Coti» Nosiglia. El área se encarga de reunir la información de otras reparticiones.
Según fuentes de inteligencia, este funcionario nombró a una directora de Reunión que proviene de la PSA. En la AFI no confirman ni niegan porque se escudan en el secreto al que obliga la ley 25.520 de inteligencia.
Por debajo del segundo de la AFI, también, recalaron un coronel retirado como subsecretario de Análisis, y otro coronel en retiro como secretario de Planificación, ambos de los cuales también son asociados con Milaini. También hay otro ex militar, mano derecha del ex jefe del Ejército K, que está como asesor sin cargo.
El único que no formó parte del riñón de Milani fue el coronel que fue designado como Subsecretario de Contrainteligencia. Luego como delegado de la embajada argentina en Chile opera un ex espía muy allegado a Pocino.