Según datos del Boletín Epidemiológico Nacional, Argentina experimentó un aumento alarmante de casos de dengue, pasando de 198.148 notificaciones en 2023 a 759.867 en el mismo período de 2024. De ellos, fueron confirmados por laboratorio 188.183, con circulación de DEN 1 y DEN 2, aunque el caso de un contagio de DEN 4 en Córdoba generó preocupación por el riesgo de reinfección con otros serotipos.
El médico infectólogo, Hugo Pizzi, se refirió a los casos en Córdoba que “se adelantaron tres meses y una semana a la predicción epidemiológica”. A pesar de la presencia mayoritaria de DEN 1 y DEN 2, inidcó que “otro impacto que tuvimos fue el de este señor que vino de Cuba con el serotipo 4”. De todas formas, aclaró que se trató de un hecho aislado y se logró hacer lo posible para no expandir el contagio.
A nivel país, señaló que otras provincias comenzaron a reportar casos, como La Rioja y Entre Ríos, y los reportes de contagios “se van adelantando cada vez más”. En cuanto al comportamiento del Aedes, compartió que se trata de “huevos que pusieron las hembras el año pasado, ya estaban con el virus, entraron en latencia con el frío y con los primeros golpes de calor empezaron a eclosionar y ya nacen los mosquitos con el virus”.
Respecto a serotipos más agresivos de dengue, respondió que para él “uno de los más contundentes sería el 2, por eso se hizo la vacuna en base a eso”. Sin embargo, remarcó que los cuatro serotipos “son importantes”. En Argentina, “ya tenemos problemas con el 1, el 2, pocos con el 3 y si arriba viene el 4 ya es como jugar a la ruleta rusa”, aseguró.
A pesar de ello, habló del riesgo de la reinfección, ya que “el de la primera vez te va a dar inmunidad hasta que te mueras, pero el asunto es cuando te infectás con otro distinto y hace una sinergia de potenciación, con cuadro grave o hemorrágico”.
Acerca de la vacunación contra el dengue, recordó que “el peso de los acontecimientos hizo que las distintas jurisdicciones compraran”. Por su elevado costo, su utilización se da en grupos determinados, de acuerdo a los criterios epidemiológicos de cada provincia.
Más allá de la convocatoria acotada de cada jurisdicción (donde no toda la población objetivo acude a inmunizarse) y los pedidos en farmacias para comprar en privado, comentó que la realidad actual es que “no hay vacunas”.
De momento, Pizzi compartió que están atentos a los avances de una nueva vacuna que viene de Brasil, que es una sola dosis y al estar en el Mercosur “va a salir una sexta parte de lo que vale la (vacuna) japonesa”. Sin embargo, adelantó que se encuentra en etapa de prueba y probablemente se encuentre lista recién para marzo.
Por otra parte, remarcó que son importantes los operativos en los barrios para eliminar potenciales criaderos, donde solo en Córdoba se retiraron 150 toneladas de elementos en tres barrios: “No sabía que un porcentaje enorme de casas tenían porquería en el techo, porque una cosa es tenerlas en el patio (recipientes que juntan agua, gomas, cacharros) pero ¿en el techo?”, relató.
Entre los desafíos para el sistema de salud, aparece también la expansión de los casos de dengue hacia puntos del sur del país contra todo lo que se pensaba hace algunos años ya que “hay mosquitos de Bariloche y casos en Chubut, Río Negro, Neuquén”. Pensando en el cambio climático, coincidió en que “hubo un efecto invernadero, la climatología cambió”.
Fuente; Primera Edición