La crisis golpea a Corrientes: la forestadora Tapebicuá suspende su producción y deja 520 empleados sin trabajo


La medida se produce en medio de una crisis financiera, una deuda salarial con el Sindicato de la Madera y un embargo judicial que agrava el panorama.
a crisis económica nacional golpeó de lleno a la industria forestal correntina. La Forestadora Tapebicuá SA, una de las principales productoras de madera de la región, anunció la suspensión de sus operaciones por un mes en su planta de Virasoro.
La decisión, que se hizo efectiva el pasado viernes, dejó a 520 trabajadores en la incertidumbre y pone en alerta a toda la cadena productiva de la región.
El cese de actividades es el resultado de una crisis que la empresa venía arrastrando, agravada por una deuda salarial con sus empleados, que incluye el sueldo de julio y el medio aguinaldo.
La situación laboral se tensó aún más con la demanda del Sindicato de Trabajadores de la Madera (STM), que reclamaba una deuda de 170 millones de pesos y que culminó en un embargo judicial sobre una cuenta bancaria de la firma.
El embargo judicial agrava la situación
La empresa sostiene que el embargo complica aún más su capacidad para cumplir con las obligaciones salariales y reactivar la producción.
«Con el embargo, se nos imposibilita acceder a los fondos necesarios para cumplir con nuestras obligaciones. Estamos en conversaciones para destrabar la situación», indicaron voceros de Tapebicuá.
Por su parte, el Sindicato de la Madera insiste en que la deuda salarial y las irregularidades contractuales exigen una solución inmediata.
El parate no solo afecta a los empleados directos de la firma, sino también a proveedores, transportistas y contratistas que dependen de la actividad forestal en la zona.
Un golpe para la economía regional
La industria forestal es uno de los motores económicos del norte de Corrientes, con una fuerte presencia en localidades como Virasoro y Santo Tomé.
La paralización de Tapebicuá representa un duro golpe no solo para los 520 empleos directos, sino también para las decenas de pequeñas y medianas empresas que dependen de su actividad.
Economistas locales advierten que una prolongación de la suspensión podría llevar a la pérdida definitiva de los puestos de trabajo y a una caída significativa en la recaudación municipal y provincial.
En el corto plazo, la reactivación de la planta dependerá de una negociación que permita levantar el embargo y de la obtención de capital de trabajo para retomar la producción. El sindicato no descartó tomar medidas de fuerza si no se regularizan los salarios en los próximos días.
