Elecciones en Misiones: Carlos Rovira, el caudillo que admira Cristina Kirchner y que busca extender su hegemonía desde las sombras

Maneja el poder del oficialismo misionero detrás de los gobernadores; ocupó ese lugar cuando se le cerró la posibilidad de una reelección; el domingo extendería su hegemonía si triunfa su delfín, Hugo Passalacqua

Cristina Kirchner no lo quiere, pero lo admira como a pocos dirigentes políticos. La admiración es mutua. Se trata del exgobernador de Misiones Carlos Eduardo Rovira, quien está por cumplir nada menos que 24 años ininterrumpidos al frente del poder político de la provincia, y no necesariamiente con cargo de primer mandatario. Este domingo intentará extender su hegemonía por otros cuatro años en las elecciones domésticas.

Hugo Passalacqua, delfín de Rovira, buscará este domingo regresar al cargo de gobernador tras un primer mandato (2015-2019), al enfrentar al joven radical Martín Arjol, el candidato de Juntos por el Cambio y segundo favorito en las encuestas.

Si Passalacqua se impone, será el quinto mandato consecutivo que Rovira ubica a un hombre propio al mando de la provincia. Todos le respondieron siempre de manera incondicional, y Passalacqua no sería la excepción. Los anteriores fueron Maurice Closs (2007-2015), Passalacqua (2015-019) y Oscar Herrera Ahuad. Sólo Closs intentó manejarse con cierta autonomía y está hoy relegado de la cúpula de la Renovación, el frente provincial que ostenta cierta hegemonía y lidera Rovira, un ingeniero químico de 67 años que combina el perfil bajo con las apariciones esporádicas para afianzar su liderazgo.

El paso de Rovira del primer plano como gobernador a mandamás en las sombras se produjo en 2007, después de haber perdido la elección constituyente un año antes contre el cura Joaquín Piña, una figura clave para impedir su segunda reelección. Desde entonces, el caudillo maneja la provincia como legislador provincial, pero con terminales en los tres poderes: Ejecutivo, Legislativo y Judicial.

Además de controlar el Poder Legislativo y el Ejecutivo a sus anchas, la influencia de Rovira tampoco es ajena a la Justicia provincial. La presidente del Superior Tribunal de Justicia, Rossana Venchiarutti, suele participar en actos con el gobernador y otras figuras que tienen por objetivo “acercar la Justicia a la gente” y desacartonar la imagen de los jueces.

Ivan Pelinski, uno de los hijos de Venchiarutti, es médico y va como candidato oficialista a concejal de Posadas por uno de los 11 sublemas que tiene la Renovación para alzarse con el triunfo en la capital, un distrito que al oficialismo siempre le cuesta controlar.

Justamente la Ley de Lemas (en la categoría municipal) es otro de los secretos de “El Ingeniero” (como también se lo llama) para mantenerse en el poder, ya que le permite aplicar a rajatabla la estrategia del “divide y reinarás”.

Para estas elecciones habrá en Misiones se presentan 753 candidatos a intendente (42 en Posadas) y más de 4.000 candidatos a concejales por los 78 municipios. Casi la mitad son del oficialismo. Otro dato: en Misiones todos los municipios son de intendentes oficialistas.

Rovira nació en Posadas hace 67 años, un 18 de febrero de 1956 bajo el signo Acuario. Estudió en la Escuela Técnica N°1 y luego se recibió de ingeniero químico en la UNaM. Se abrió paso en la política como un técnico, formal y obediente, y supo esconder sus ambiciones cuando Ramón Puerta lo impulsó a la intendencia de Posadas en 1995. Cuatro años más tarde llegó a La Rosadita, la casa de gobierno provincial. Puerta lo sigue lamentando, como Duhalde con los Kirchner.

Impulsado por el santacruceño, Rovira rompió con Puerta en su segundo mandato como gobernador, se abrió del PJ y lanzó el Frente Renovador de la Concordia, invitando a una variopinta colección de peronistas, radicales, transversales, independientes y oportunistas. De origen peronista, “el conductor” (otra forma de designarlo) se encargó, a lo largo de los años, de borrar del mapa primero al PJ y más acá en el tiempo al kirchnerismo.

En cambio, la UCR y Pro resisten, y cada tanto le dan algún susto. En 2021, Juntos por el Cambio le ganó a la Renovación las PASO y las generales de noviembre. Parecía que por primera vez 2023 auguraba una disputa con final abierto. Sin embargo, Rovira y sus operadores actuaron rápido tras la elección de medio término y aceitaron los mecanismos para que las 10 o 20 principales figuras opositoras se sientan cómodas en sus cargos de diputados provinciales, concejales o asesores y pierdan el apetito competitivo.

Complementó su estrategia cooptando a algunas figuras de la oposición y sembrando algunos “caballos de Troya” o dirigentes que, en apariencias son opositores, pero a la larga terminan siendo funcionales a las estrategias de “el conductor”.

De Yacyretá a la revolución en salud

Algunas de las obras más visibles son la espectacular Costanera de Posadas, ejecutada por su ex delfín Oscar Thomas, a quien colocó al frente de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) por más de una década. Thomas estuvo prófugo 48 días cuando la Justicia lo buscó por haber estado involucrado en los cuadernos de las coimas de Oscar Centeno.

Otro rubro donde Misiones se destaca es la Salud Pública. El Posadas Parque de la Salud es un grupo de hospitales que comprende prestaciones inéditas en muchas provincias, como un Centro Oncológico o el robot Da Vinci para operaciones de alta complejidad. Muchos que tienen prepagas se atienden igual allí. Hasta la cadena alemana Deutsche Welle vino hace unos años a realizar un reportaje sobre mamografías 3D que ofrece a mujeres de bajos recursos un hospital del barrio de Villa Cabello. Los editores alemanes se sorprendieron con semejante nivel de prestaciones en forma gratuita para cualquiera.

“La mortalidad infantil bajó de 32 cada 1000 recién nacidos en los 90 a 7,8 cada 1000″ dijo el gobernador y pediatra, Oscar Herrera Ahuad, el lunes pasado en la apertura de sesiones de la Legislatura, donde la Renovación movilizó su aparato y juntó unas 3000 personas que fueron a saludar al jefe a la salida de ese acto (foto).

La inversión en salud también es un agujero negro para el manejo de los fondos públicos y existen sospechas de empresas que se beneficiaron como proveedores privilegiados en ese rubro.

En 2020 el periodista Horacio Verbitsky publicó el listado de las 100 personas que más dinero sacaron del país -en forma legal y cuando aún Macri no había reinstaurado el cepo- y en el sorprendente puesto 20° figuraba el misionero Ramón Alfonzo.

Alfonzo hace unos años tenía una pequeña farmacia en el centro de Posadas. Sindicado como un hombre muy cercano a Rovira, Alfonzo transformó a su Farmacia Grobli en una gran droguería que le factura millones al Estado.

El desconocido empresario compartió ese “top 20″ con apellidos como Enrique, Matías y Sebsatián Eskenazi (exdueños de YPF), Claudio Belocopitt (Swiss Medical), Gerardo Werthein o Nicolás Catena (Catena Zapata).

Economía del conocimiento

Pero más allá de la salud o de obras modernizadoras, el mayor legado en el que trabaja el ingeniero, sin dudas, es el de subir a su provincia a la economía del conocimiento, para lo cual creó una Escuela de Robótica donde miles de chicos aprenden a armar kits o descubren su vocación por la tecnología.

También cuenta con una escuela secundaria de Educación Disruptiva y acaba de inaugurar el Silicon Misiones, una suerte de incubadora de start ups locales y de otras provincias que busca emular al Silicon Valley y cuyo moderno edificio se inauguró hace un mes.

El Gobierno también formó una empresa mixta llamada FAN IOT y Misiones se convirtió en la cuarta provincia en diseñar un auto eléctrico (detrás de Buenos Aires, San Luis y Córdoba), el prototipo lleva las sugestivas siglas “CR”. La empresa también diseñó y construyó vehículos todoterreno que vendió a Parques Nacionales y trabja para lanzar un nanosatélite para lo cual trajo a un técnico de la CONAE que trabajaba en Falda del Carmen y está especializado en cohetería.

Una de las claves para lograr que su hegemónico partido logre esquivar el voto “anti” que domina la política argentina desde hace años. “Yo no conozco a casi nadie”, dijo Rovira, sobre la nueva militancia a la que llamó Renovación NEO, en un acto de lanzamiento el 17 de marzo último, que también sirvió para inaugurar el edificio del Silicon Misiones.

Para algunos la Renovación NEO es un verdadero programa de retiros masivos donde “el Ingeniero” va jubilando a viejos cuadros políticos y los reemplaza por una colección de jóvenes sub-40, muchos de ellos formados en prestigiosas universidades o provenientes del sector privado.

Ninguno se queja -al menos públicamente-, al contrario, como nadie sabe bien quién sube y quién baja en el escalafón, todos se cuidan y luchan por no ser los siguientes “nominados”, como en la casa de Gran Hermano.

Si bien nadie habla de la sucesión de este hombre que en 2026 cumplirá 70 años, en las dos últimas apariciones públicas se presentó con su hijo Ramiro, un contador de 28 años al que también empezó a mencionar en sus discursos.

Como Máximo con Cristina, Ramiro Rovira tampoco pintaba por el lado de la política hasta hace poco, pero ahora todos lo empiezan a mirar como un posible sucesor en un partido donde una colección de jóvenes está llegando para ocupar espacios cada vez más importantes.

Lucas Romero Spinelli (candidato a vicegobernador), Anazul Centeno (candidata a diputada), Paula Franco, Sergio Bresiski (empresario que se sumó al Gobierno), Alicia Penayo (una abogada que trabajó en Techint y está en el Silicon) o Rudito Bundziak (quien el año pasado salió campeón del TC Mouras y se recibió de abogado en la UADE).

Rovira logró cambiar la dinámica de un oficialismo que en su primera década solía premiar a los leales con cargos públicos. Ahora, la apuesta es por los jóvenes. “Para progresar (en la Renovación) hay que levantarse a las 7, estudiar y resolver problemas de la gente”, sentenció Rovira, hablándole a su tropa el mes pasado.