El Gobierno abrió la importación de electrodomésticos de línea blanca y otros bienes de origen extranjero al país, siempre que su destino sea el uso doméstico particular. Hasta ahora, quedaban fuera del régimen de equipaje tradicional. Con esta decisión, se podrían comprar y traer desde Chile cocinas, hornos, equipos de lavandería, refrigeración y climatización, lavavajillas, campanas extractoras, sistemas de calefacción y termotanques, y más.
La decisión fue anunciada el martes pasado mediante la resolución IG-2025-3-E-ARCA-DGADUA, firmada por el director general de Aduanas, Andrés Velis, la cual amplió la resolución ANA N.º 3.751/94. Ese marco normativo rigió durante décadas, y establecía que el equipaje permitido era con franquicias específicas y excluía a ciertos artículos por sus características, volumen o valor.
Este cambio puede favorecer a los consumidores ya que, en las tiendas del otro lado de la Cordillera de los Andes, esos mismos productos se encuentran a precios comparativamente muy inferiores.
Por ejemplo, las heladeras medianas se consiguen a menos de mitad de precio que en Argentina (AR$ 522 mil); las cocinas, un 50% más económicas (AR$ 215 mil); los lavarropas con una diferencia del 40% (AR$ 494.000), los aires acondicionados, a un tercio del valor que se paga en el país (AR$362.000) u hornos eléctricos, un 40% más baratos (AR$ 215.000).
La disparidad de precios se explica, en muchos casos, por factores arancelarios, como la carga impositiva, o los costos logísticos internos y las diferentes estrategias comerciales en cada país.
No obstante, a favor de las compras en el territorio nacional se encuentran las facilidades de pago a plazos sin intereses, la garantía con cobertura nacional y la entrega a domicilio.
En rigor, desde la entrada en vigencia de la normativa, todas las personas mayores de 16 años pueden declarar electrodomésticos y otros bienes individuales a través de este sistema. Para que te entreguen el producto en la Aduana, es obligatorio que el usuario presente la documentación y el comprobante de pago que se generaron en el sitio web de ARCA.
Desde su cuenta de X, el Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, celebró la medida.
Cómo funciona el nuevo esquema
El nuevo sistema digital que lanzó la Dirección General de Aduana para declarar los productos traídos al país se usa de la siguiente manera:
- Tenés que completar un formulario llamado OM2153-A, que funciona como una declaración jurada. Lo vas a encontrar en la sección «Viajeros» de la página web de ARCA.
- Básicamente, lo que tenés que hacer es avisar qué producto vas a traer, confirmar que es para tu uso personal y, después de que el sistema verifique tus datos, te va a generar automáticamente una factura con un código QR para que pagues los impuestos. Una vez que pagues, ya podés importar el producto.
Sin embargo, hay algunas condiciones importantes: el producto tiene que ser nuevo, no puede ser para vender o usar en un negocio o industria, y solo podés traer una unidad por año calendario.
Qué tenés que saber: condiciones, límites y controles aduaneros
Al usar este sistema, tenés que pagar los impuestos y aranceles que corresponden a cualquier importación. El formulario que presentás es una declaración jurada, lo que significa que toda tu información y documentos pueden ser revisados por la Aduana. Si el tipo de producto lo requiere, también puede haber inspecciones de otros organismos.
No podés traer más de una unidad por año ni usar los productos importados para actividades que te generen ganancias, ya sean comerciales o industriales.
La lista de productos permitidos y las instrucciones para usar la plataforma están disponibles en la sección «Viajeros» de ARCA.
Todas las oficinas de Aduana recibieron la orden de controlar, informar y ayudar a aplicar este nuevo sistema. Quien mienta en la declaración jurada por superar la cantidad permitida o vender los productos comprados, podría sufrir sanciones y quedar inhabilitado para futuras importaciones.