Alarma en Iguazú por caso de trabajo infantil: una niña de 5 años se perdió mientras vendía en la calle


Una niña de 5 años fue encontrada llorando y sola en una esquina del centro de Puerto Iguazú, lo que reavivó las alertas sobre la problemática del trabajo infantil en la ciudad. La menor había llegado junto a su madre desde la localidad de Wanda para vender artesanías en la vía pública.
El hecho ocurrió el viernes por la tarde y generó preocupación entre vecinos y turistas que se cruzaron con la pequeña, quien tenía en sus manos dos arbolitos confeccionados con piedras semipreciosas. Al ser abordada por los presentes, relató que se había perdido de su madre y que temía que ella regresara a Wanda sin ella. Según comentó, era la segunda vez que viajaban juntas para trabajar en las calles de Iguazú.
Los transeúntes alertaron a la Policía, que se hizo presente minutos después. Durante la espera, la niña reconoció a otros chicos con los que había llegado a la ciudad. Dos personas emprendieron una rápida búsqueda y lograron encontrar a dos niñas que dijeron conocerla. No obstante, al notar la presencia policial, ambas se asustaron y corrieron del lugar gritando que “la policía nos reta”.
La menor fue trasladada a la Comisaría de la Mujer, donde se activó el protocolo correspondiente para estos casos. Más tarde, la Comisaría Primera confirmó que la madre de la niña se presentó espontáneamente tras ser alertada por otros menores que presenciaron lo ocurrido.
La mujer explicó que mientras ella vendía sus productos en la vía pública, los niños se encontraban sentados en una mesa cercana, y que les había pedido que no se movieran. Dijo desconocer por qué se alejaron y aseguró que no suele llevar a su hija a trabajar, aunque vive de la venta ambulante de piedras y artesanías.
La Policía de Misiones concretó la entrega de la niña tras realizar las actuaciones administrativas correspondientes.
Este caso pone nuevamente en el centro del debate la situación de muchos niños y niñas que son expuestos al trabajo infantil en Puerto Iguazú, especialmente en contextos de vulnerabilidad. Algunos provienen de comunidades mbya guaraní, otros de localidades cercanas como Wanda, y frecuentemente deambulan sin supervisión adulta, quedando expuestos a riesgos como la violencia, el abuso o el consumo de estupefacientes.
Las autoridades insisten en la necesidad de reforzar los controles y acompañar con políticas públicas que protejan los derechos de la infancia y garanticen condiciones dignas para las familias trabajadoras.
ElTerritorio