Se registró «lluvia negra» en la provincia como consecuencia de los incendios forestales en países vecinos

Tal como había anticipado el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), este jueves las precipitaciones llegaron a Misiones, pero con un inquietante ingrediente adicional: el humo proveniente de los incendios forestales en Bolivia, Paraguay y Brasil. Esta densa cortina de humo, producto de la quema de millones de hectáreas de bosques en países vecinos, generó una crisis ambiental de gran magnitud y ahora se cierne sobre la provincia.

El fenómeno de la «lluvia negra» se produce cuando el humo, compuesto principalmente por partículas de hollín y cenizas, se mezcla con la humedad y los sistemas meteorológicos, arrastrando estos contaminantes hacia la superficie. En el caso particular de Misiones, las imágenes compartidas en redes sociales por «Pronóstico Misiones» muestran cómo el agua acumulada adquiere un inquietante color grisáceo o negro, incluso con presencia de espuma, evidenciando la contaminación.

Esta situación es el resultado directo de los incendios que han devastado extensas áreas boscosas en países limítrofes, provocando una crisis ambiental sin precedentes que ahora se traslada a la provincia a través de los vientos. La llegada de la lluvia en este contexto de contaminación atmosférica genera el fenómeno de la «lluvia negra», con potenciales consecuencias negativas para la salud y el medio ambiente.

En las primeras horas del dia en la Escuela Adventista de El Alcázar, los docentes juntaron el agua de  lluvia para corroborar si tenia color oscuro,  lo mismo hicieron en la escuela primaria de  la comunidad Mbya Guarani de Peruti,  donde hace aproximadamente una hora se registraron también pequeños granizos en algunos sectores de la aldea. Si bien hasta el momento la lluvia caída es escasa en la zona norte, hay personas expectantes para ver el fenómeno.

Recomendaciones ante la lluvia negra y el humo
Ante esta situación, el Ministerio de Salud provincial reiteró una serie de recomendaciones, entre ellas principalmente el uso del barbijo y evitar las actividades al aire libre. Esto se debe a que la inhalación de partículas contaminantes como cenizas y hollín puede agravar afecciones respiratorias y cardiovasculares, provocando síntomas como dificultad respiratoria, tos e irritación de los ojos.
Además, se recomienda mantenerse informado por las autoridades y tomar precauciones al circular, conduciendo despacio, manteniendo la distancia y utilizando las luces bajas en caso de baja visibilidad por humo.